Descubren en un hogar de Villalbilla una anaconda de constricción que no había ingerido alimentos en varios meses
En un sorprendente hallazgo, los servicios de protección animal de la localidad de Villalbilla han descubierto una anaconda de constricción en un hogar particular. Lo más impactante de este caso es que el reptil no había ingerido alimentos en varios meses, lo que ha generado gran preocupación entre los expertos y los responsables de su cuidado. La anaconda, que se encuentra en un estado de debilidad, ha sido trasladada a un centro especializado para recibir atención veterinaria y rehabilitación. Se desconoce aún cómo llegó este animal exótico a la vivienda y se han iniciado investigaciones para esclarecer los hechos.
Investigación policial por anaconda ilegal en Villalbilla
La Guardia Civil ha iniciado una investigación contra un propietario de Villalbilla que mantenía una boa constrictor imperator en su domicilio de manera ilegal. La denuncia fue interpuesta por los convivientes del dueño, quienes alertaron a las autoridades sobre la presencia del ofidio en la vivienda.
Agentes del Seprona de Alcalá de Henares realizaron una inspección en el domicilio y solicitaron la documentación correspondiente al propietario de la serpiente. Sin embargo, éste solo pudo aportar una factura de compra por valor de 80 euros, lo que no fue suficiente para justificar la tenencia del animal.
Irregularidades en la tenencia del animal
Tras una exhaustiva inspección, se detectaron varias irregularidades en la tenencia del animal. En primer lugar, el microchip del animal no estaba registrado, lo que impide identificar su origen y procedencia. Además, el propietario no pudo acreditar que estaba alimentando adecuadamente a la serpiente, lo que llevó a los agentes a determinar que el animal había pasado varios meses sin recibir comida.
Las irregularidades detectadas llevaron a la Guardia Civil a imputar un delito contra la flora y la fauna al propietario. La boa constrictor imperator es una especie considerada peligrosa y está incluida en el Apéndice II del CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres), lo que requiere un registro municipal y un seguro específico.
La tenencia de esta especie está sujeta a regulaciones estrictas, y el propietario debe cumplir con una serie de requisitos para evitar daños a la salud y la seguridad de las personas y los animales. La Guardia Civil recuerda la importancia de cumplir con la normativa vigente en materia de protección de la fauna y flora.
La investigación sigue en curso, y se espera que se tomen medidas para garantizar la seguridad y el bienestar de la serpiente y de las personas involucradas.
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