Madrid sufre un aumento alarmante de la contaminación por ozono: ecologistas exigen medidas urgentes para reducir emisiones del transporte y la industria
La capital española se enfrenta a una situación crítica en cuanto a la calidad del aire. Un informe reciente ha revelado que la contaminación por ozono en Madrid ha registrado un aumento alarmante en los últimos meses. Los niveles de ozono en la atmósfera han superado los límites establecidos por la Unión Europea, lo que supone un riesgo grave para la salud pública. Ante esta situación, los ecologistas están exigiendo al gobierno que tome medidas urgentes para reducir las emisiones contaminantes procedentes del transporte y la industria. Es imprescindible actuar con rapidez para proteger la salud de los ciudadanos y garantizar un futuro más sostenible para la ciudad.
Contaminación por ozono en Madrid: Un problema de salud pública que exige una respuesta urgente y efectiva de las autoridades
La primera ola de calor del verano ha desencadenado un aumento alarmante de la contaminación por ozono en el aire del centro y sur de la Península Ibérica. La radiación solar y las emisiones contaminantes del tráfico rodado, el transporte marítimo y aéreo, y la mayor generación eléctrica en centrales térmicas, por el mayor uso de aire acondicionado, han provocado un aumento sin precedentes en los niveles de ozono en el aire.
En una docena de estaciones de medición de este contaminante, repartidas por Barcelona, Madrid y Sevilla, se han registrado veinticinco superaciones del umbral de información a la población desde el pasado 18 de julio. La mayoría de ellas se produjeron durante la tarde de este miércoles, llegando a rebasarse el umbral de alerta en Puertollano (Ciudad Real) el pasado viernes día 19.
Las estaciones afectadas incluyen Tona y Vic en Barcelona, Barajas Pueblo, Barrio del Pilar, Ensanche de Vallecas y Parque Juan Carlos I en Madrid, Alcalá de Henares, Algete y San Sebastián de los Reyes en la Comunidad de Madrid, y Centro y Santa Clara en Sevilla. En todas ellas se ha superado el umbral de información a la población, alcanzándose la concentración máxima en la estación Campo de Fútbol de Puertollano, con unos elevadísimos 248 microgramos de ozono por metro cúbico de aire.
Umbral de información y umbral de alerta
El umbral de información a la población está establecido en 180 microgramos de ozono por metro cúbico de aire, como media horaria, mientras que el umbral de alerta se eleva hasta 240 microgramos por metro cúbico. La previsión de superación del umbral de información obliga a las autoridades autonómicas a advertir a las personas más sensibles a la contaminación atmosférica de que se protejan evitando cualquier esfuerzo físico y los ejercicios al aire libre en las horas centrales del día y a la caída de la tarde.
No obstante, la Junta de Andalucía, la Junta de Castilla-La Mancha, la Generalitat de Catalunya y la Comunidad de Madrid se han limitado a difundir avisos rutinarios una vez producidas las superaciones, lo que resulta insuficiente para proteger la salud de la población más afectada. Ecologistas en Acción denuncia que estas administraciones y la mayoría de las restantes comunidades autónomas y grandes y medianas ciudades carecen de protocolos de actuación frente a episodios de mala calidad del aire por ozono, pese a que debían haberse dotado de los mismos con la aprobación en 2007 de la vigente Ley de calidad del aire y protección de la atmósfera.
Peticiones a las autoridades
Ante la prolongación de la actual ola de calor hasta el fin de semana, Ecologistas en Acción pide a las autoridades autonómicas y locales restricciones de la circulación de vehículos a motor, como la prohibición de la circulación de aquellos más contaminantes, la reducción de la velocidad, el encarecimiento de los estacionamientos centrales o la bonificación y refuerzo del transporte público, medidas encaminadas a reducir las emisiones del principal precursor del ozono, como es el dióxido de nitrógeno.
Además, propone limitar el funcionamiento de las centrales termoeléctricas y otros grandes focos industriales como la industria petroquímica, esencial en el caso citado de Puertollano, para reducir la gravedad del actual episodio de alta contaminación.
Consecuencias para la salud
El ozono troposférico, también conocido como ozono “malo” por contraposición al de la estratosfera, es un contaminante secundario producido por la reacción entre la luz solar y el dióxido de nitrógeno y los hidrocarburos emitidos por los automóviles y algunas industrias. Por inhalación, provoca un incremento del riesgo de enfermedades respiratorias agudas y reducción de la función pulmonar, así como el agravamiento de patologías cardiovasculares.
La Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) y el Instituto de Salud Global de Barcelona han estimado entre 2.000 y 3.000 las muertes anuales en España atribuibles a la exposición a niveles de ozono como los registrados estos días. El ozono, además de para las personas, también es tóxico para la vegetación, dañando los bosques y reduciendo la productividad de los cultivos.
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