Regresan a Carabanchel los vecinos que llevaron sus protestas a la ONU por la escasez de médicos en su centro de salud
Después de varios meses de lucha y denuncia internacional, los vecinos de Carabanchel que llevaron sus protestas a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) por la escasez crítica de médicos en su centro de salud, han decidido regresar a su barrio. La comunidad, cansada de la inacción institucional, había decidido llevar su caso a la corte internacional para denunciar la situación de abandono y descuido en que se encontraba su centro de salud. Ahora, con la esperanza de que su lucha haya dado frutos, los vecinos han decidido regresar a su barrio para exigir soluciones concretas y mejoras sustanciales en la atención médica.
Vecinos de Carabanchel regresan de Ginebra con promesas de protección de derechos humanos
La representación de la Asamblea Popular de Carabanchel ha regresado a Madrid tras un viaje en bicicleta a la ciudad suiza de Ginebra, donde denunciaron la falta de médicos en el Centro de Salud Abrantes y la situación crítica del sistema de atención primaria en la Comunidad de Madrid.
Los vecinos se reunieron con el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, con altos funcionarios de la Organización Mundial de la Salud, con las Misiones Permanentes de España y otros países miembros de la ONU, así como con medios de comunicación, ONG, sindicatos y asociaciones del tejido social suizo, y miembros del Consejo de Gobierno de la ciudad de Ginebra.
En todas las reuniones, los vecinos expusieron la situación particular del Centro de Salud de Abrantes, que carece de pediatras y tiene menos de la mitad de los médicos de familia que le corresponden, lo que genera demoras de hasta 2 meses en la atención sanitaria. También hablaron sobre la situación crítica del sistema de atención primaria en la Comunidad de Madrid.
Según los vecinos, se han abierto líneas de trabajo conjuntas para activar los mecanismos de protección de derechos humanos, con especial hincapié en cómo la política de recortes de personal de la Comunidad de Madrid afecta al Derecho a la Salud, especialmente en los centros caídos como el de Abrantes.
El Centro de Salud Abrantes, situado en el distrito madrileño de Carabanchel, es uno de los denominados centros caídos de Atención primaria. Según la ley, debería tener un mínimo de 17 médicos de familia y 8 pediatras, pero en la actualidad carece de pediatras y tiene menos de la mitad de los médicos de familia que le corresponden.
La lucha de los vecinos no es nueva. Más de cuatro años de protestas denunciando la falta de médicos y personal sanitario en el Centro de Salud Abrantes han llevado a más de 140 manifestaciones, entrega de miles de firmas y reclamaciones, de encierros en el centro de salud y en la Gerencia, y finalmente, a la interposición de denuncias en los juzgados de guardia.
El pasado 26 de julio, cuatro personas en representación de la Asamblea Popular de Carabanchel emprendieron un viaje de más de 1.500 km en bicicleta desde Madrid hasta Ginebra para denunciar la problemática de la Sanidad Pública en la Comunidad de Madrid.
La lucha de los vecinos de Carabanchel es un ejemplo de la importancia de la defensa de los derechos humanos y la protección de la salud pública. Esperamos que las promesas de protección de derechos humanos hechas en Ginebra se traduzcan en acciones concretas para mejorar la atención sanitaria en el Centro de Salud Abrantes y en toda la Comunidad de Madrid.
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